> Diario de Abish: Invitación a hacer de la adoración a Dios un modo de vida

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domingo, 31 de agosto de 2025

Invitación a hacer de la adoración a Dios un modo de vida

Teniendo en cuenta que adorar significa "amar y reverenciar a Dios y rendirle servicio y devoción" (Guía para el Estudio de las Escrituras), una evaluación minuciosa de nuestra conducta puede revelar si, verdaderamente, estamos adorándole. 

Porque no, no se  trata de asistir al servicio religioso de la Iglesia solamente sino de, como cita el élder D. Todd Christofferson en su mensaje, "alabar y venerar intencionalmente a nuestro Dios de una forma que nos transform[e]". Y para que esa transformación se lleve a efecto, nuestra vida debe ser una suma de acciones pequeñas, sencillas, cotidianas y constantes. La adoración puede manifestarse, por ejemplo:
  • a través de la forma que vestimos, "no de forma extravagante, sino modesta, de un modo que indique nuestro respeto y reverencia por la Deidad.";
  • al unirnos en oración;
  • al cantar himnos;
  • al instruirnos y aprender unos de otros;
  • al servirnos y sostenernos unos a otros;
  • al dedicar el día de reposo al Señor y Sus propósitos;
  • al tomar la Santa Cena;
  • al escudriñar las Escrituras;
  • al dar testimonio de Cristo;
  • al recibir al Espíritu Santo;
  • al sentir y expresar gratitud por las bendiciones recibidas;
  • al amar a Dios y someter nuestra voluntad a Él;
  • al seguir el ejemplo perfecto de Jesucristo;
  • al hacer y guardar convenios.

"Pero la hora viene, y ahora es, cuando los verdaderos adoradores adorarán al Padre en espíritu y en verdad, porque también el Padre busca a tales para que le adoren." (Juan 4: 23)

 

Yo misma experimenté cambios en mi vida al amar, servir y reverenciar a Dios de estas (y otras) maneras significativas desde el 16 de septiembre de 2007, día de mi bautismo en La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días.  El adorar "cada día, cada día, cada día [y] cada semana, cada semana, cada semana", como aconseja el élder Peter M. Johnson me ayudó a elevarme a alturas que nunca imaginé.


Y con este mensaje, se despide el mes de Agosto. Nos reencontramos en Septiembre, ¿te parece?