> Diario de Abish: 2020

Translate

lunes, 21 de diciembre de 2020

Mis aliados a la hora de rendir

Acabo de anotarme para rendir seis materias de Lengua y Literatura en los finales de marzo-abril de 2021. Como el límite es de veinte alumnos por mesa solo queda esperar que, entre esos veinte de cada llamado, aparezca mi nombre... Mientras, espero 😏.

Te quiero contar que ya tuve mi primer experiencia en un final, justo hace  una semana atrás. Me estuve preparando diecinueve días, volviendo a ver los videos que el profe grabó para desarrollar los temas, releyendo textos, haciendo mapas conceptuales, practicando sola y delante de mi esposo como si estuviese dando un examen oral, etc. 

Pero como por naturaleza soy ansiosa y me pongo nerviosa ante las cosas nuevas (creo haberlo mencionado en algún otro post) en determinado momento mi mente se llenó de dudas; de miedo de no poder lograrlo, de bloquearme en pleno examen, de que mi mente se quedara en blanco y me olvidara de todo lo estudiado 😭. 

Acá viene la razón principal de esta publicación y es que de verdad, estoy convencida, no podría haberlo logrado sin esa ayuda adicional que me brindó la bendición del sacerdocio (recibida dos dias antes del final), el ayuno y la oración. Obviamente tuve el apoyo de mi familia, hora tras hora durante todo el tiempo que duró mi preparación pero no puedo dejar fuera de la ecuación al Padre Celestial. ¿Por qué? Porque en muchas otras ocasiones, cuando tuve que dar una clase o discursar frente a la congregación el Espiritu Santo me dijo aquello que debía decir. Algo que no sabés de mi es que, a veces, tengo muuuy mala  memoria (es por eso que me acostumbré a tener a mano mis anotaciones, bien claras y numeradas para saber qué decir; o sea, me atengo a un "esquema") pero en el momento de pasar al púlpito o de estar frente a una clase las palabras "fluyen". Es increíble, el temor se va, mi voz no tiembla, hablo con seguridad. Esa paz solo me da la da una oración previa y silenciosa.

Tampoco me quiero olvidar de otros aliados: las escrituras y los himnos y canciones de la Iglesia.

En lo que duró mi preparación "sobrevolaron" estas escrituras (y similares):

"Todo lo puedo en Cristo que me fortalece." Filipenses 4: 13
"Mirad hacia mí en todo pensamiento; no dudéis; no temáis." Doctrina y Convenios 6: 36
"...buscad primeramente el reino de Dios y su justicia, y todas estas cosas os serán añadidas. Así que, no os afanéis por el día de mañana, porque el día de mañana traerá su propio afán." Mateo 6: 33-34
"...no os preocupéis de cómo o de qué hablaréis, porque en aquella hora os será dado lo que habéis de hablar. Pues no sois vosotros los que habláis, sino el Espíritu de vuestro Padre que habla en vosotros." Mateo 10: 19-20
"Pedid, y se os dará; buscad, y hallaréis; llamad, y se os abrirá. Porque todo el que pide, recibe; y el que busca, halla; y al que llama, se le abrirá." 3 Nefi 14: 7-8


En cuanto a los himnos,  no recuerdo exactamente cuáles escuché pero serenaron mis nervios mientras esperaba mi turno para rendir.

El examen duró aproximadamente diez minutos. Lo di con una compañera, con la que nos turnamos para hablar y ¿sabes qué? ¡Aprobé!

Ahora que sé que los exámenes finales no son ese "monstruo" que me había imaginado, y después de unir a mi esfuerzo personal la ayuda divina estoy mejor preparada para esos otros finales del año que viene.




jueves, 3 de diciembre de 2020

Ilumina el Mundo (en clave de verso)





De vez en cuando, siento la necesidad de expresar mi sentir en clave de verso. Como hoy, justo, es uno de esos días, mi espíritu de "poeta" inicia esta publicación 😉.

Hace catorce días el Profeta nos alentó a crear una "ola de gratitud" en las redes. Muchos respondimos a esa invitación y el resultado fue mayor paz y felicidad en nuestros corazones. Desde el primero de diciembre la Iglesia nos pide que iluminemos el mundo. En esta oportunidad no voy a compartir las actividades, como lo estuve haciendo los años anteriores, sino que te dejo acá los recursos para que vos mismo/a seas parte de la diferencia.




La actividades diarias↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷



Acá más recursos para Iluminar el Mundo (pese a todo).


sábado, 21 de noviembre de 2020

Cómo sobrevivir en un mundo "enfermo"

¡Escribo esta publicación archi-mega-super entusiasmada! Más adelante, quizás, te cuente mayores detalles pero no quería dejar pasar esta oportunidad sin contarte que ayer nuestro Profeta dio un breve mensaje que es, te lo aseguro, para todos, especialmente en estos tiempos. Te invito a verlo, escucharlo y a unirte a su invitación↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷


Por mi parte, desde hoy y por siete días, me pondré "manos a la obra". ¿Nos leemos en las redes?

jueves, 19 de noviembre de 2020

Lo que causó que amara más el Profesorado



Hoy tengo ganas de contarte qué es lo que provocó que con el correr de los días, al estudiar en el Profesorado, especialmente las materias de Pedagogía y Didáctica, me sintiera más y más convencida de que la docencia es algo a lo que me quiero dedicar.

Pero primero, te invito a adentrarte en la vida y pensamientos de dos de los pedagogos que elegí, junto a unas compañeras, para responder qué significa ser docentes de Lengua y Literatura: Gabriela Mistral y Paulo Freire.




Te soy sincera: ¡los amé! Muchos de sus métodos pedagógicos ya los tenía vistos e, incluso, los fui aplicando a lo largo de los cinco años en que fui maestra de seminario. Y es que si, ¡pude encontrar en estos pedagogos muchos puntos en común con las enseñanzas de Jesucristo!

Veamos: 
  • Jesucristo enseñó a adultos (tanto hombres como mujeres) y a niños; a ricos y pobres; a los cultos y a los que tenían escasos conocimientos; a los poderosos y a los marginados; individualmente y a multitudes. Todos eran importantes para Él,  no desechó a nadie.
  • Mostró a Sus discípulos, a través de ejemplos claros y sencillos, de preguntas significativas, la manera de aprender por sí mismos lo que podía ser para el beneficio de sus almas.
  • Enseñó en todos los ámbitos: dentro de una sinagoga, en el Templo, al aire libre, a bordo de una barca, en los hogares mismos.
  • Exhortó a aplicar Sus enseñanzas a situaciones cotidianas de la vida ("Ve y haz... lo mismo." Lucas 10: 37)

Para que entiendas un poco más de lo que hablo, comparto fragmentos de un discurso que leí como parte de mi estudio personal


"La meta del maestro es...  que el alumno descubra la verdad por si mismo y se sienta motivado a aplicarla. Aunque hay quienes parecen ser maestros natos, las técnicas didácticas pueden aprenderse. ¿A quien pueden acudir los maestros para mejorar sus técnicas? ¿Podrían observar a otros maestros y aprender de ellos? ¿O quizás podrían pedirle a un buen maestro que los observara y les diera sugerencias...?... Podemos ... tratar de aprender y practicar nuevas técnicas.

El maestro....  Hacía preguntas importantes. Todos ...compartían ideas, se escuchaban unos a otros. Hablaban de los problemas que había en la escuela y de cómo se aplicaban a la lección....

…un maestro.... entiende que “recae sobre el alumno la responsabilidad del aprendizaje. Por lo tanto, es a el a quien se debe poner en acción...

…Un buen maestro no piensa: “¿Que haré hoy en clase?”, sino, “¿Que harán mis alumnos hoy en clase?” No piensa: “¿Que enseñaré hoy?”, sino, “podré hacer que mis alumnos se den cuenta de lo que tienen que saber?” 

El aprendizaje se lleva a cabo mejor en un ambiente de confianza y seguridad. Eso significa que se respetan las preguntas y los comentarios de cada persona...

...Tanto el maestro como los alumnos comparten la responsabilidad de mantener un ambiente de confianza y seguridad.

Es responsabilidad del maestro presentar la lección y ayudar a establecer las bases. En medio de la lección, los alumnos participan y tratan de comprender y aplicar los conceptos..."  (El salón de clase común y corriente, Virginia H. Pearce)


"Se invita a todos los maestros... a que adopten los siguientes principios fundamentales... 
1. Amen a quienes enseñan.
  • Dediquen atención a cada persona.
  • Concéntrense en las necesidades de sus alumnos.
2. Prepárense .
  • Vivan de acuerdo con lo que enseñan.
  • Estén al tanto de los recursos disponibles.
3. Enseñen (mediante el Espíritu)
  • Sean maestros dóciles a quienes se les pueda enseñar
  • Creen un ambiente propicio para aprender.

        4. Descubran... juntos

  • Establezcan altas expectativas.
  • Alienten a sus alumnos
  • Hagan preguntas eficaces.
  • Escuchen a sus alumnos.

        5. Enseñen (la doctrina)

  • Utilicen historias y ejemplos.

6. Inviten a los alumnos a actuar
  • Ayuden a sus alumnos a practicar.
  • Den seguimiento a las invitaciones que extiendan.

Al aplicar estos principios, llegaremos a ser mejores maestros, mejores alumnos, mejores padres y... a raíz de esa experiencia no sólo salgan informados, sino transformados." (¿Qué clase de maestros hemos de ser?)
 


Si llegaste hasta el final de esta publicación habrás podido comprobar cuánto del Evangelio hay en los métodos pedagógicos actuales. Sin saberlo (o sabiéndolo, como yo), los docentes están enseñando a la manera del Salvador. ¿No es un hermoso "descubrimiento"?

Si querés saber más sobre Jesucristo y Su manera de enseñar, te invito a conocer Su vida en las Escrituras

martes, 17 de noviembre de 2020

Otra perspectiva en cuanto al fracaso

Creo que te conté que se nos venían los exámenes encima. En mi caso,  había creído que podía rendir varias materias y al final solo puedo rendir una, quedando la mayoría para febrero o marzo (en el mejor de los casos).

No te voy a negar que me decepcioné, desanimé y hasta me enojé con algunos profesores. Ya me veía abrumada en el futuro, rindiendo y creyendo que no iba a ser capaz de poder aprobar. Sí, lo confieso, soy muy ansiosa. En varios momentos me planteé que esto, el ser docente, no era para  mí porque no pude acreditar contenidos al primer intento. Ahora sé que, si no rindo en diciembre, lo haré en febrero y sino, en agosto pero lo voy a lograr.

Después de meditar bastante y orar mucho, llegué a la conclusión de que "fracasar" no es tan malo. No significa que haya algo malo en mí, que no esté capacitada. sino que es una circunstancia que no determina mi futuro y que puede servirme como trampolín, como un impulso para avanzar más y mejor.


Transcribo a continuación partes del discurso que me ayudaron a tener otra perspectiva en cuanto a las cosas que por ahora no puedo lograr:

"Los errores forman parte de la vida...

Se ha dicho que “el éxito no consiste en la ausencia del fracaso, sino en ir de fracaso en fracaso sin eliminar el entusiasmo”

En 1970, como estudiante de primer año en BYU, me inscribí en un curso básico sobre los fundamentos de la física impartido por Jae Ballif, un destacado profesor. Al final de cada unidad del curso nos hacía un examen. Si un alumno obtenía una C (una nota suficiente) para aprobar y deseaba mejorarla, el profesor Ballif le permitía tomar un examen modificado que abarcaba el mismo material. Si el alumno o la alumna mejoraba su calificación en el segundo intento, pero seguía sin estar conforme, podía tomar el examen una tercera vez, y una cuarta, etcétera. Al darme tantas segundas oportunidades, él me ayudó a sobresalir y al final obtener una A (una nota sobresaliente) en su clase.

Nadie está más de nuestro lado que el Salvador. Él nos permite tomar y seguir tomando Sus exámenes. Llegar a ser como Él requerirá incontables segundas oportunidades en nuestras luchas diarias contra el hombre natural, como controlar los apetitos, aprender la paciencia y el perdón, vencer la pereza y evitar los pecados de omisión, solo para mencionar algunos. Si errar es humano, ¿cuántas veces fracasaremos hasta que nuestra naturaleza deje de ser humana y sea divina? ¿Miles? Muy probablemente un millón." (Hasta setenta veces sieteélder Lynn G Robbins)

jueves, 12 de noviembre de 2020

Publicación "express"

Esta publicación es cortita, cual vuelo "rasante" de gaviota en altamar (?), para quien ande por el éter y me llegue a leer 😜.  ¿Te acordas que te conté que había empezado un Taller de Literatura Infantil y Juvenil y, además, un curso de inglés que dan los misioneros? Bueno, por falta de tiempo no les podía dedicar la atención que merecían y, lamentablemente, tuve que abandonarlos. Ambos eran en dia de semana y se me complicaba con el asunto del Profesorado, etc.

La buena noticia es que me anoté en un curso de autosuficiencia que dan los días sábados y domingos, que es cuando estoy más libre.

¿De qué trata este curso? Para explicarte, no encontré nada mejor que este video




Para mí, el poder participar de este curso es la respuesta a muchas oraciones que he venido haciendo y una manera en la que el Padre Celestial me está ayudando con mi progreso.

Empiezo este sábado, así que ya te contaré (espero)  como me va yendo.


lunes, 9 de noviembre de 2020

8 de noviembre de 2020: un día para recordar




¿A qué no sabés? ¡Volvimos a la capilla! Si, ese día que parecía tan lejano, al final es una realidad.

Protocolos mediante, pudimos  renovar nuestros convenios. Como hay un límite en las reuniones,  los miembros nos iremos turnando para que todos tengan la posibilidad de asistir (excepto  menores de doce años y mayores de sesenta hasta que la Subsecretaría de Cultos de la Matanza indique que sí pueden.)

En lo personal, este regreso me generó sentimientos encontrados. Por un lado, salir de casa para reunirme con otras personas me resultó extraño (no es para menos, después de casi 8 meses de aislamiento obligatorio, ¿no?) y, por el otro, volver a ver a mi hijo mayor bendecir la Santa Cena, entonar los himnos sacramentales y compartir con otros hermanos y hermanas el discurso que me asignara el obispo,  me hizo sentir tan feliz e infinitamente agradecida con mi Padre Celestial  como me imagino se sintió el resto por sus propias bendiciones personales.

El tema de mi discurso no pudo ser más oportuno. Me tocó hablar de El Libro de Mormón. Hoy más que nunca, las personas (y no solo los miembros de La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días) deben conocer de qué trata. No es un libro más. Es realmente "otro testamento de Jesucristo". Gracias a él, podemos tener respuestas a las preguntas mas profundas de la vida. Tiene el poder de darnos luz, entendimiento y guía personal, de disipar la confusión, la oscuridad, la mentira y el error. Por si no sabias, estas escrituras fueron grabadas en planchas de oro pero no era el material del que estaban hechas lo que era de gran valor sino su contenido (Mormón 8: 14).

De todas las cosas que se puede decir, enseñar, compartir de El Libro de Mormón elegí, como parte de mi discurso, las listas que el presidente Nelson hizo en cuanto a lo que que afirma, refuta, cumple, aclara y revela. Si llegaste hasta acá te pido que sigas leyendo y lo descubras por vos mismo/a.


Presidente Russell M. Nelson escribiendo sus listas de El Libro de Mormón. Imagen: masfe.org


El Libro de Mormón es:

  • Otro Testamento de Jesucristo. Sus principales autores (Nefi, Jacob, Mormón, Moroni) y su traductor, José Smith, fueron todos ellos testigos oculares del Señor.
  • Un registro de Su ministerio entre las personas que vivieron en la antigua América.
  • Verdadero, como atestiguó el Señor mismo.

El Libro de Mormón afirma:

  • La identidad individual del Padre Celestial y de Su Hijo Amado, Jesucristo.
  • La necesidad de la caída de Adán y la sabiduría de Eva, para que los hombres tengan gozo.

El Libro de Mormón refuta las nociones de que:

  • La revelación terminó con la Biblia.
  • Los niños pequeños tienen necesidad de bautizarse.
  • La felicidad puede hallarse en la maldad.
  • La bondad individual es suficiente para la exaltación (las ordenanzas y los convenios son necesarios).
  • La caída de Adán mancilló al género humano con el “pecado original”.

El Libro de Mormón cumple con las profecías bíblicas de que:

  • “Otras ovejas” oirán Su voz.
  • Dios llevará a cabo “una obra maravillosa y un prodigio” hablando “desde el polvo”.
  • El “palo de Judá” y el “palo de José” llegarán a ser uno.
  • El Israel esparcido será recogido “en los últimos días”, y la manera en que se efectuará.
  • La tierra de la herencia del linaje de José se encuentra en el hemisferio occidental.

El Libro de Mormón aclara nociones como:

  • La existencia preterrenal.
  • La muerte. Es un componente necesario del gran plan de felicidad de Dios.
  • La existencia posterrenal, que empieza en el paraíso.
  • La resurrección del cuerpo, reunido con el espíritu, llega a ser un alma inmortal.
  • El Señor nos juzgará de acuerdo con nuestras obras y los deseos de nuestro corazón.
  • La manera correcta de efectuar las ordenanzas: por ejemplo, el bautismo, la Santa Cena y la manera de conferir el Espíritu Santo.
  • La expiación de Jesucristo.
  • La Resurrección.
  • La función importante de los ángeles.
  • La naturaleza eterna del sacerdocio.
  • La manera en que la conducta humana es más susceptible al poder de la palabra que al de la espada.

El Libro de Mormón revela información previamente desconocida:

  • Se efectuaban bautismos antes del nacimiento de Jesucristo.
  • Los antiguos pobladores de América edificaban templos y los utilizaban.
  • José, el undécimo hijo de Israel, previó la función profética de José Smith.
  • Nefi (600–592 a. C.) previó el descubrimiento y la colonización de América.
  • Se perdieron partes claras y preciosas de la Biblia.
  • Cada persona recibe la Luz de Cristo.
  • La importancia del albedrío y la necesidad de que haya una oposición en todas las cosas.
  • Advertencias acerca de las “combinaciones secretas”

Acá vas a encontrar el discurso completo en el cual me basé para preparar parte del mío.



viernes, 23 de octubre de 2020

Mi método personal para aprender de textos académicos (y no, no es por ósmosis)

 23 de octubre de 2020. ¡A menos de un mes de la finalización de la cursada! 😲

Desde las primeras dudas, incertidumbres, el Taller inicial, las participaciones en el foro virtual (allá por abril-mayo) hasta hoy, con los primeros trabajos prácticos "aprobados", pasaron varios meses y ¡oh, sorpresa!, sigo todavía en carrera 😁

Cierto es que hubo varios momentos en que quise largar todo pero ahí estuvo mi familia alentándome y, por sobre todo, el Padre Celestial, animándome, a través de las escrituras y del sacerdocio, a continuar.

Algo que me ayudó mucho (pero mucho, ¿eh?) a encarar textos académicos, difíciles de entender (por lo menos para mí) fue el empezar cada estudio, cada lectura, con una oración. Hubo momentos en que conceptos que no entendía, se aclararon en mi mente gracias a este hábito. No, no es algo "mágico". Hay estudio, esfuerzo, constancia, el leer y releer detrás pero el Señor promete que si hacemos lo que esté a nuestro alcance, Él hará el resto.


"Lo que es de Dios es luz; y el que recibe luz y persevera en Dios, recibe más luz, y esa luz se hace más y más resplandeciente hasta el día perfecto. DyC 50: 24

"Pues he aquí, así dice el Señor Dios: Daré a los hijos de los hombres línea por línea, precepto por precepto, un poco aquí y un poco allí; y benditos son aquellos que escuchan mis preceptos y prestan atención a mis consejos, porque aprenderán sabiduría; pues a quien reciba, le daré más..." 2 Nefi 28: 30


Traté de tomarme todas las cosas con calma, paso por paso, para no llegar al límite de "desbordarme".


Imagen: Siora Photography on Unsplash


"Y mirad que se hagan todas estas cosas con prudencia y orden; porque no se exige que un hombre corra más aprisa de lo que sus fuerzas le permiten." Mosíah 4: 27

"No corras más 
aprisa, ni trabajes más de lo que tus fuerzas y los medios proporcionados te permitan..." DyC 10:4


Así que acá está mi "fórmula". Llegaré hasta donde tenga que llegar. Sé que si está en mi camino el ser docente, lo seré aunque, en el medio, haya obstáculos y alguna que otra frustración.

Se acercan los finales😁. En alguna otra publicación te contaré cómo me fue.


lunes, 19 de octubre de 2020

Detalles, recordatorios y "mimos" en el Día de la Madre

Soy de las que piensa que el Día de la Madre es todos los días, en el sentido de que no hay que esperar a esa ocasion "especial" para homenajearla, para comprarle algo, para visitarla, para "dedicarle" tiempo.  Aclaro: no significa que pase por alto esa fecha como si fuera una "más". De hecho, es una oportunidad en la que uno detiene un poco el ir y venir continuo y aprovecha para reunirse con la familia y pasar buenos momentos.

Alguien compartió en las redes esta publicación, en relación con el Día de la Madre (la verdad, no recuerdo quién)↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷



¡Qué significativas palabras! Más aún en este contexto de aislamiento, ¿no? El de ayer fue un Día de la Madre atípico, muy acotado para algunos y, quizás, no tanto para otros; pero en el que, seguramente, el amor hacia las madres se manifestó de la manera que describió el élder Utdchorf en uno de sus  discursos: "En las relaciones familiares, amor en realidad se deletrea t-i-e-m-p-o, tiempo." 

¿Me permitís que te comparta un poquito de cómo fue mi domingo? 

Con mi hermana, le hicimos una breve visita a mi mamá↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷



Por la tarde, di la clase a las mujeres y a los hombres jóvenes de la Iglesia por pedido de mi hijo, que es consejero de Escuela Dominical.

Hablamos de la obra "grande y maravillosa" que tendría lugar en los últimos tiempos, de la restauración del Evangelio, de la obra misional (de la que todos podemos formar parte) y, por último, compartí estas hermosas palabras que el presidente Russell M. Nelson le dirigió a los jóvenes de la Iglesia en el Devocional mundial de 2018:


“Ciertamente estos son los últimos días, y el Señor está acelerando Su obra para recoger a Israel. Ese recogimiento es lo más importante que se está llevando a cabo hoy en la tierra. Nada se le compara en magnitud, nada se le compara en importancia, nada se le compara en majestad. Y si eligen hacerlo, si lo desean, pueden formar gran parte de él. Pueden formar parte de algo grandioso, algo espectacular, ¡algo majestuoso!
Cuando hablamos del recogimiento, simplemente estamos diciendo esta verdad fundamental: cada uno de los hijos de nuestro Padre Celestial, a ambos lados del velo, merece escuchar el mensaje del evangelio restaurado de Jesucristo…
¡Piensen en ello! De todas las personas que han vivido en el planeta tierra, nosotros somos los que participaremos en este último y grandioso recogimiento. ¡Qué gran emoción!…
Ese recogimiento debería significar todo para ustedes. Esta es la misión para la cual fueron enviados a la tierra” 

Casi sin darse cuenta, mi hijo me hizo un regalo: el de ayudarme a servir en la obra del Señor.  ¡Él y yo trabajando juntos en Su iglesia! ¿Qué más se puede pedir?

Más tarde, participé de una videollamada con los misioneros y una niña de Primaria que se va a bautizar↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷




Como broche de oro, una videollamada express desde Rexburg↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷



Pudo haber sido un día atípico, como dije más arriba; no pudo haber sido como imaginábamos o esperábamos pero lo que no faltó fueron esos "detalles", esos recordatorios, esos "mimos" que tanto bien hacen al espíritu.

jueves, 8 de octubre de 2020

Cosas que esta pandemia nos ayudó a valorar

Tengo menos de una hora libre hasta que empiece el primer Zoom del día así que aprovecho para sentarme y escribir estas líneas.

La verdad, nunca estuve tan ocupada como en estos días. En teoría, el tiempo tendría que sobrarnos ahora que algunos estamos en casa y, sin embargo, pareciera que las tareas se han multiplicado. Que ironía, ¿no? Bueno, pero me di cuenta de que el estar todo el tiempo con "algo por hacer" no es necesariamente bueno. Hay otras cosas que pueden ser "mejores" e, incluso, "excelentes".

El martes pasado tenía una reunión con compañeras del Instituto para hacer un trabajo práctico y, luego, clases. Así venía organizándome y mi tiempo lo estaba ocupando casi en su totalidad la carrera (y otras actividades "extracurriculares", como el Taller de Literatura Infantil y Juvenil, y las clases de inglés). De alguna manera, me había armado una "rutina", de la cual no me movía y dejaba otras cuestiones "para después".

Yo hace tiempo que no visito a mi mamá (el tema del coronavirus volteó todo de cabeza, no hace falta que te lo diga) así que nos hablamos por videollamada. Pero el martes, sentí que debía hacerle una visita, con todas las precauciones, claro. Deje de lado la reunión y fui a verla. La verdad, pasamos una mañana hermosísima. Desayunamos y almorzamos juntas. Pude compartir con ella enseñanzas del Evangelio que venían a mi mente (que le levantaron el ánimo, ya que venía atravesando complicaciones con su salud) y volví a casa con el tiempo para participar de la segunda clase. Me vino muy bien "desacelerar" un poquito y darle prioridad a lo que verdaderamente importa. Porque uno puede tener mucho estudio y conocimiento pero si da vuelta la cara a los afectos, a quienes nos necesitan ahora y no "después" venimos a ser como "metal que resuena o címbalo que retiñe" (1 Corintios 13: 1). De más está decir, además, que nada te recarga más las "pilas" que el poder hablar frente a frente, de poder sentir la mirada, la presencia física del otro, ¿no te parece? Cosas que esta pandemia nos ayudó a valorar.




Esta experiencia con mi mamá hizo que, en los días previos a la Conferencia General (que se transmitió estos 3 y 4 de octubre), mi estudio personal de las escrituras se centrara en el servicio que brindamos a los demás. Así leí sobre "Cómo llegar a ser instrumentos en las manos del señor" y "Estar anhelosamente consagrados" (fragmentos de estos discursos los tengo en mi otro diario. En algún momento, quizás, los comparta en este).

En fin, la cuestion es que siento mucha gratitud hacia mi Padre Celestial cada vez que recibo de Él estos dulces "recordatorios" cuando me salgo un poco de mi "eje".


domingo, 6 de septiembre de 2020

La "buena parte" que me estaba perdiendo




Algo que, de verdad, no quiero olvidar y, por eso, lo escribo acá: últimamente no estaba participando de las clases vía Zoom de la Iglesia, un poco porque, justo a esa hora, estoy trabajando con la Historia Familiar y otro poco por... Pero, pensándolo bien, no hay una razón, lo suficientemente valedera, como para no participar.

Una muy buena hermana me mandó hoy un mensaje y compartió conmigo palabras que me ayudaron a cambiar mi perspectiva (justo lo que estaba necesitando). La cuestión es que participé (aún sin cámara ni micrófono, porque mi computadora no tiene) y fui nutrida espiritualmente. Hablamos de Samuel el Lamanita.

Con mi hijo, en nuestro estudio del Ven sígueme, estuvimos viendo como Samuel el Lamanita no se rindió cuando fue rechazado al predicar el Evangelio. A él lo echaron de la ciudad pero volvió porque el Señor lo inspiró.

 "Y aconteció que en este año un tal Samuel, un lamanita, llegó a la tierra de Zarahemla y empezó a predicar al pueblo. Y ocurrió que por muchos días predicó el arrepentimiento al pueblo, y lo echaron fuera, y se hallaba a punto de regresar a su propia tierra. Mas he aquí, vino a él la voz del Señor de que volviera otra vez y profetizara al pueblo todas las cosas que le vinieran al corazón." (Helamán 13: 2-3)

¿Que halló al regresar? Una alta muralla. ¿Se rindió al no poder entrar por ningún lado? ¿Desistió? Tenia una excusa perfecta para no cumplir con el mandamiento. ¿Cómo iba a entrar, si no había por donde? La ciudad estaba amurallada. ¿Qué hizo él? Lo imagino pensando, buscando alternativas, posibles soluciones. Finalmente, decidió subir por la muralla.

"Y aconteció que no permitieron que él entrase en la ciudad; por tanto, fue y se subió sobre la muralla, y extendió la mano y clamó en alta voz, y profetizó al pueblo todas las cosas que el Señor le puso en el corazón." (Helamán 13: 4)

¿Cuántas veces no nos encontramos delante de lo que pareciera ser una muralla alta, imposible de franquear (problemas, adversidades) y nos desanimamos y, simplemente, nos dejamos vencer, dejamos de intentar
?

Justo hablaba con Benja que Samuel no puso excusas y yo, sin darme cuenta, estaba poniendo excusas, justificándome con que, si bien no estaba participando de las clases, estaba trabajando en la Historia Familiar. Pero las dos cosas son importantes.

Algo, aún más impresionante, hizo Samuel el Lamanita. Muchos creyeron en su predicación y se bautizaron, pero muchos otros no creyeron y quisieron matarlo, lanzándole flechas y piedras. Me lo imagino en lo alto de la muralla, viendo venir hacia él toda esa artillería. ¿Qué pensaría en ese momento? Sería un buen momento para huir, para desistir, ¿no? Sin embargo, él permaneció allí, predicando imagino, mientras piedras y flechas pasaban a su lado.


                                    


¿Qué lo haría mantenerse firme, enfrentando la oposición? ¿Sentiría miedo, inquietud? Puede ser que sí, puede ser que no pero algo es seguro: su fe era más poderosa que su temor.  ¿Por qué?

"... y le arrojaron piedras sobre la muralla, y también muchos lanzaron flechas contra él mientras se hallaba sobre la muralla; mas el Espíritu del Señor estaba con él, de modo que no pudieron herirlo con sus piedras ni con sus flechas." (Helamán 16: 3)

Él tenia la seguridad de que el Señor lo iba a proteger o ayudar de alguna manera. 

Me encanta la historia de Samuel; la fe y la valentía que demostró. Quizás no experimentemos lo mismo que experimentó él. No correremos el riesgo de que nos lancen piedras y flechas (al menos, eso espero) pero sí enfrentaremos burlas, descalificaciones, etc., por defender la verdad. En este sentido, Samuel es un buen ejemplo de como reaccionar, y en quién hay que confiar.

En fin, estoy muy agradecida por el interés que esta buena hermana demostró por mí, porque me ayudó a recordar que había una "buena parte" (sí, la misma que mencioné en m
i publicación anterior) que me estaba perdiendo.

viernes, 4 de septiembre de 2020

Breve "repaso" de este 2020 en materia de estudio

Año "movidito" este 2020, ¿no? En mi caso particular, sumado a los acontecimientos que conocemos de sobra, está el tema del estudio.

Y es que sí, después de años de no agarrar una lapicera ni de abrir una carpeta, tomé la decisión de empezar el profesorado de Lengua y Literatura. Digamos que el deseo emergió en el último tramo del año pasado. Tras consultarlo con mi familia (porque, cuando uno va a emprender algo de tal magnitud, el apoyo de la familia es indispensable) tuve que hacer algunos trámites, como legalizar mi partida de nacimiento (lo hice online y en tiempo récord), y que firmaran y sellaran el analítico de secundaria en el Consejo Escolar de mi distrito.

Un dato igualmente importante: en la mayoría de los institutos la fecha de inscripción ya había pasado así que pensé que ya estaba, no había mas que hacer, la oportunidad ya había pasado. Pero cuando seguí buscando, por si "de casualidad" encontraba algún otro instituto me "topé" con la página web de uno que queda a pocos kilómetros de casa. La primer fecha ya había pasado pero ¡faltaba la segunda! Mas entusiasmo sentí cuando vi que el horario seria a la tarde (en turno mañana o vespertino se me haría cuesta arriba). Las cosas se fueron dando de una forma tan natural que me di cuenta de la compañía de mi Padre en todo el proceso.

Aparte del profesorado, empecé clases de inglés con los misioneros y, por si esto fuera poco, me anoté en un taller de literatura infantil y juvenil. Quizás pienses: "¿Para qué, si ya tiene suficiente con el profesorado?" Yo misma lo he pensado, te lo confieso. Pero, bueno, aprender un nuevo idioma es siempre provechoso; y el taller de escritura es para mejorar mis técnicas de escritora, además que amplía mis horizontes. Como ya dije en algún otro post, me gustan los "desafíos" 😜.

Y hablando de desafíos: el profesor de Pedagogía pidió colaboración para formar parte de un video que se mostrará este once de septiembre, por el Día del Maestro. La colaboración es pequeñita; apenas decir una frase de uno de los pedagogos que estamos estudiando. Pero todo suma ¿no?


            


No descuido, igualmente, la parte espiritual ("la buena parte" mencionada en Lucas 10: 42). Los domingos son sagrados. Trato de que estén íntegramente dedicados al Señor. Usualmente, hago historia familiar, indexo registros genealógicos, miro videos de la Iglesia, escucho himnos, etc. Justamente el domingo pasado, navegando por Youtube, vi el siguiente Programa Dominical, transmitido desde Chile:

                                          


De más esta decir que fue un hermoso "broche de oro" y me cargó de energías para encarar la semana. ¿Hacés la prueba?


"...sí, buscad palabras de sabiduría de los mejores libros; buscad conocimiento, tanto por el estudio como por la fe." (Doctrina y Convenios 88; 118)

martes, 21 de julio de 2020

Mi faceta de escritora

Hace mas de dos años, exactamente el 7 de marzo de 2018 (lo sé porque lo corroboré 😜), te contaba un poco sobre mi faceta de escritora. Por si te entro curiosidad y querés refrescar la memoria, podés entrar acáActualmente (como habrás leído en el post anterior), tengo los suficientes cuentos como para publicar un libro. Por ahora, el dinero sigo sin tenerlo (hay otras prioridades) así que voy a probar mandando cuentos a concursos literarios. Estoy muy entusiasmada porque encontré algunos que me interesaron (el por qué no estuve mandando cuentos todos estos años, siendo que publicaron uno en una antología en 2005, quedará en el misterio. ¡Ahora me doy cuenta el tiempo que desperdicié!😞)



El primer concurso que tengo en la mira (porque ofrece, de premio, la edición del libro si quedás seleccionado, con el plus que te dan trescientos cincuenta ejemplares) es este↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷




Recomiendan registrar, previamente, las obras en la Dirección Nacional de Derechos de Autor. Así que en los próximos días trataré de empezar el trámite. No sé cuánto tarda pero espero llegar con los tiempos. Te iré contando como me va (en todo caso es una buena idea registrar mi obra porque así estarán protegidas contra el plagio)

Otro, que también me interesó mucho, es este↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷




Me interesaría ahondar en el género de terror. Ya tengo un par con esta temática. Aunque piden un mínimo de cien paginas y no tengo tantas. Lo tomare como un desafío personal; a ver si logro cumplir con el requisito hasta el dia del cierre.

Y hablando de cuentos de terror y de desafíos, hace unos meses mandé un cuento de terror para una antología que tenia que tener doscientas setenta palabras (o mil doscientos caracteres). Lo escribí y me había pasado, así que lo reestructuré hasta cumplir con el requisito. El fallo recién lo sabré después del treinta y uno de octubre (cierre del concurso). Para la misma editorial mandé un poema cuya temática giraba en torno a la pandemia, y fue publicado, junto a otras obras, en un libro digital (y físico, bajo demanda).

Ahora que lo pienso, ¿será este mi año como escritora? ¡¡Así sea!!

lunes, 13 de julio de 2020

No te rindas, seguí adelante, no pierdas de vista la meta

         


La verdad a veces no sé si escribir las cosas pequeñas que me pasan porque, aunque para mí son relevantes y significativas, temo terminar aburriéndote. Pero el contenido que quiero compartir hoy lo amerita.

Muchas veces, no te lo voy a negar, pienso que no hay espacio para mi voz, para lo que yo quiero contar. No solamente en este blog sino también en lo que escribo en mis cuentos. (Tengo unos cuantos acumulados ya y, salvo un par de personas, nadie mas los ha leído. Son mi tesoro. ¿Te cuento un secreto igual? Estoy en proceso de enviarlos a un concurso literario pero eso es tema de otro post 😜) Hay muchas otras voces que acaparan la atención de las personas y, quizás, mi mensaje se pierda en la multitud. No obstante, espero, no ser la única.

En esto pensaba justamente la semana pasada cuando una publicación en un grupo de genealogía, del que soy miembro, atrajo mi atención. Era un video acompañado con las siguientes palabras: "Esta fue la voz de su padre pero así actúa nuestro subconsciente". La verdad esas pocas palabras me transmitieron una linda sensación así que le di play.

Como te dije en el post anterior las cosas no suceden por casualidad. El video me hizo recordar que, en realidad, no estoy sola; que no soy la única que quiere transmitir la palabra de Dios, porque, detrás de ese video, había alguien más compartiendo un mensaje positivo al mundo (más tarde descubrí que es miembro de la Iglesia, como yo 😍)

Te recomiendo que veas el video. Seas o no creyente, seas o no miembro de La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días, este mensaje es para vos.




Este video me hizo recordar inmediatamente a otro, que reproduce la experiencia que tuvo la hermana Elaine S. Dalton cuando, en una maratón, se sintió sola y perdida. También lo dejo acá para que lo veas.




La vida es como una maratón, ¿no? Hay obstáculos, pendientes difíciles de subir, desafíos que parecen más grandes que nuestras fuerzas y que nos hacen querer abandonar, a veces, la carrera. (¿A quién no le pasó?)

Entonces, como dice el titulo de este post, el mensaje de hoy sería: "No te rindas, seguí adelante, no pierdas de vista la meta."

¿Nos seguimos viendo?


miércoles, 1 de julio de 2020

¿Casualidad o la mano de Dios manifestándose a través de las oportunas palabras de terceros?



                                      
Aprovecho este momento libre que tengo, entre la comida y el estudio, para contarte porque estuve alejada del blog. Por un lado, no estuve muy bien de ánimo, producto del encierro, del aislamiento (¡qué se yo); por el otro, estoy cursando el Profesorado de Lengua y Literatura (¡Sí, empecé a estudiar! De cómo fue que tomé la decisión, quizás, te lo cuente más adelante, ¿te parece?) y mi tiempo se va entre lecturas de textos, actividades, reuniones via Zoom, Instagram, etc., etc. 

Pero hoy me quiero concentrar en la parte del desánimo. Como miembro de la Iglesia (seguramente, ya te lo he dicho en alguna otra oportunidad, o te habrás dado cuenta por mis publicaciones), trato de mantener una vision positiva y optimista de las cosas. Pero, de vez en cuando, caigo. A veces es un instante; en otras oportunidades, el sentimiento dura un poco más pero, al final, siempre me vuelvo a levantar. Me ayuda mucho orar, leer las escrituras, ayunar y, por sobre todo, dejar todo en las manos del Señor y confiar. Como dijo
el presidente Thomas S. Monson en una Conferencia General:

“Haz tu deber, eso es lo mejor; y deja el resto en manos del Señor”.

Aparte de las cosas que te nombré más arriba hubo otras cosas que me dieron ese "empujoncito" para aclarar mi visión, mi perspectiva, los sentimientos contradictorios que estaba teniendo.

Una, fue la charla que dio una psicóloga, miembro de la Iglesia, en Enlace de Fe, en la que dio algunos consejos para saber cómo enfrentar los efectos anímicos del aislamiento en el contexto de la pandemia. A mí me sirvió mucho, sobre todo porque fue desde la perspectiva de la fe.

Otra, el fragmento de un poema que encontré navegando en las redes y que me invitaba a "no rendirme".  ¿Casualidad o la mano que Dios me extendía, una vez mas, a través de las oportunas palabras de terceros?

Acá está la charla↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷



Este es el poema completo, erróneamente atribuido a Mario Benedetti↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷




Comparto esto con vos porque sé que no soy la única que se sintió (o siente) así; y tengo la esperanza que mi experiencia sea de ayuda. 

¿Qué cosas te levantan (o levantaron) el ánimo en este tiempo? ¿Lo compartirías conmigo y con los que lean esta publicación?

domingo, 21 de junio de 2020

El Movie Maker me falló. ¡Ayuda!

¿Soy yo o la apariencia del editor de entradas de Blogger está distinto? Lo más probable es que sea la segunda opción, ya que hace mas de dos meses que no posteo nada. ¿La razón? Ya te la iré contando en sucesivas publicaciones. Si todavía estás del otro lado, claro. 😖

Este domingo quería abrir mi diario y compartir un poco con vos del Día del Padre, que se festeja hoy en esta parte del mundo.

¿Qué le regalé a mi papá? Un video. Salio así, de repente. Creo que ese tipo de regalos, espontáneos, son los mejores porque van con el corazón ¿no te parece? Como un almuerzo o algo rico para compartir. Bueno, en este contexto mucho no podemos compartir así que fue, como casi todo desde hace aproximadamente tres meses, un Dia del Padre distinto.

Igualmente, la sorpresa casi se arruina. ¿Querés saber? Yo uso Movie Maker para hacer videos pero no se que pasó esta vez. Subía las fotos y se veían borrosas o, después de un rato, un cartelito me decía que tal o cual archivo no estaba. 

Ayer estuve muuchas horas subiendo fotos, borrando, cambiando, desistiendo, retomando hasta que me cansé. Probé con otros editores de videos que me habían recomendado pero el resultado no me convencía. Nuevamente, volví a mi "antiguo amor" y hoy (de madrugada) ¡por fín pude editarlo y subirlo! Yeeeahhh.

Mi esposo también tuvo su propio video. Este me costó más. Lo terminé hoy, casi casi a las apuradas, mientras él dormía. Subí las fotos, rogando que no se vieran borrosas (algunas, de cuando mi hijo mayor era bebé, quedaron afuera; no pude incluirlas porque ya tenia a mi esposo dando vueltas). Tratando de que no se diera cuenta cliquee  "Guardar" y ¡milagro! todo salió bien.

Ahora que lo pienso ¿por qué me costó tanto antes? ¡Grrrrrrr!😠 

¿Querés ver el resultado?

Acá, el video para mi papá↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷


Acá, el de mi esposo↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷


¿Sabés por qué hoy, veintiuno de junio, se celebra el Día del Padre? La historia es así: antes de la década del sesenta se celebraba el veinticuatro de agosto porque ese dia había nacido Mercedes Tomasa de San Martín y Escalada, hija de José San Martín, padre de la patria. Años después se cambio al tercer domingo de junio para hacerlo coincidir con el mismo día que se celebra en Estados Unidos. 

¿Y por que se celebra en esa fecha en EE.UU? Según lo que leí, debido a que en 1909 una mujer llamada Sonora Smart Dodd homenajeó a su padre, Willian Jackson Smart, quien era veterano de la guerra civil.

A propósito de los cambios de fecha ¿sabías que ayer empezó el invierno? Este año se adelantó porque es bisiesto. No tiene relevancia este dato pero me pareció oportuno comentarlo 😜

viernes, 10 de abril de 2020

Parte de algo verdaderamente grande


El 29 de marzo me uní a la invitación de ayunar que hizo el Profeta, para que se aliviaran los efectos físicos, emocionales y económicos de la pandemia. Aún estando aislada por la cuarentena, el poder ayunar y orar junto a otros Santos de los Últimos Días (y amigos) a nivel mundial, por un propósito elevado, me hizo sentir que formaba parte de algo verdaderamente grande, decisivo, vital. Ese día no solo me abstuve de alimento y bebida, sino que oré, indexé, estudié las Escrituras y se lo dediqué íntegro al Señor. El que fuera dia de reposo hizo el ayuno mucho mas especial.




El 4 y 5 de abril, tuvimos la Conferencia General. En la de octubre del año pasado, el presidente Nelson había dicho que esta sería "diferente de todas las conferencias anteriores", "memorable e inolvidable" y "sin igual", en el marco del bicentenario de la restauración del Evangelio. 

¡Y vaya que sí lo fue! No hubo asistencia en el Centro de Conferencias, los discursos fueron transmitidos desde un pequeño auditorio en Temple Square, al que asistieron los discursantes y oradores de cada sesión. Los himnos fueron de conferencias anteriores, pregrabados. 

Otra diferencia, respecto a años anteriores: la transmisión se siguió desde casa y no desde el centro de Estaca. Así y todo, se sintió mucho el Espíritu, nuestra fe fue renovada y se nos dieron motivos para atravesar los desafíos actuales con fe y esperanza en Jesucristo. En futuros post trataré de compartir esos motivos y algunos anuncios relevantes que se hicieron.

El Profeta pidió un segundo ayuno para hoy. Llegaré hasta donde la salud me lo permita (vengo atravesando un resfrío).




Lo más seguro es que a este post lo leas algún otro dia que no sea hoy. Igual, te invito a que te unas a ayunar y orar por la sanación física y espiritual en medio de esta pandemia. ¡El mundo lo está necesitando!

domingo, 22 de marzo de 2020

Fe y esperanza, aún en tiempos del Coronavirus





Desde el viernes, estamos en cuarentena obligatoria. Se viene una semana difícil, decisiva, acá en Argentina: dicen que a partir de mañana, y hasta el cuatro de abril, se registrará el mayor caso de contagios. Hay que evitar salir, dentro de lo posible. 

Hasta ahora, todos los infectados son personas que vinieron de Europa. Hubo algunos contagios por contacto estrecho y solo un caso de transmisión comunitaria; es decir, que el virus empezó a circular. Ante ese panorama, se prepararon hospitales para recibir a los posibles enfermos por Coronavirus, se controla que no haya demasiado tránsito de persona y vehículos en la calle, etc.

Y sí, de un momento a otro la vida se transformó. La rutina se vio interrumpida; los hábitos, alterados. Los niños están en casa (no hay clases desde el 16 de marzo). Muchas personas no pueden ir a trabajar, excepto personal de salud, bomberos, policía, etc  Hay que salir solo para comprar alimentos o remedios.

Pese a todo, hay muchas personas que transmitieron mensajes positivos en las redes sociales:
👉en Italia y en España, cantaron desde balcones.
👉comparten canciones, poemas o algún don o talento (por ejemplo: mujeres están confeccionando mascarillas para aprovisionar a los hospitales).
👉debido a la baja circulación humana, la naturaleza está tomando un respiro: en los canales de Venecia, el agua se volvió cristalina y hay peces; en lugares contaminados, el aire está mas limpio.
👉los vecinos están mirando a sus costados y ofrecen actos de servicio (a una mujer que vive sola en su edificio, le cantaron el Feliz Cumpleaños).
👉las familias están jugando, bailando, pintando juntas...

Buscando material para  este post (ya sabés que trato de compartir escrituras, videos, etc que sean edificantes), encontré el siguiente video del élder Gavarret↷↷↷↷↷↷↷↷




¿Ves como aún en medio de esta pandemia, hay fe y esperanza? 


jueves, 19 de marzo de 2020

Atravesando la tormenta...



Quizás me leas; quizás, no. Quizás visites el blog; quizás, no. Pero yo sigo por acá, compartiendo aquellas cosas que me hacen bien.

¿Compartirías este post con alguien más? A lo mejor no lo sabes pero ese alguien, quizás, lo esté necesitando.

Sigo escuchando himnos...



...y mirando videos que me fortalecen, edifican y dan paz.





En la Noche de Hogar que hicimos ayer con mi familia, vimos el siguiente vídeo, con las palabras esperanzadoras del Profeta↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷



Si llegaste hasta acá ¡ánimo! Las tormentas no duran para siempre.

"Y creará Jehová sobre toda morada del monte Sión y sobre sus asambleas nube y humo de día; y de noche, resplandor de llamas de fuego, porque sobre toda la gloria habrá una cobertura. Y habrá resguardo para sombra contra el calor del día, y para refugio y abrigo contra la tempestad y contra el aguacero." (Isaías 4: 5-6)

martes, 17 de marzo de 2020

¡Bajá un poco el volumen a las voces del mundo y subí el de la música inspiradora!

"Y todas las cosas estarán en conmoción; y de cierto, desfallecerá el corazón de los hombres, porque el temor vendrá sobre todo pueblo." (Doctrina y Convenios 88. 91)

¿Te suena familiar esto? Está pasando ¿no? De hecho, es bastante difícil guardar la calma cuando desde la televisión, las redes y, aveces, hasta tu propia familia y amigos (que, aunque tienen buenas intenciones, te abruman con consejos, recomendaciones y hasta te pasan un poco su temor) te bombardean con noticias alarmantes en cuanto a la pandemia: cada día nuevos infectados, la imprudencia de algunas personas que evaden el "distanciamiento social" recomendado por el gobierno (o, directamente, violan la cuarentena), rumores de personas inescrupulosas que aprovechan la situación para hacerse pasar por médicos, entrar a tu casa y robar, etc.

¿Qué estoy haciendo yo para conservar la calma? Una de las cosas es escuchar himnos.

Hay poder en la música ¿sabías? Y, en el caso de los himnos de la Iglesia, hay un plus. Son como una oración para el Señor.



"Porque mi alma se deleita en el canto del corazón; sí, la canción de los justos es una oración para mí, y será contestada con una bendición sobre su cabeza." (Doctrina y Convenios 25: 12)

Te prometo que si te hacés un tiempito para escuchar música inspiradora, te vas a sentir acompañado por el Señor y todo ese temor y la ansiedad se disiparán.

Ojo, esto no significa que nos evadamos de la realidad, que nos metamos en una burbuja pero si silenciamos un poco las voces del mundo y escuchamos con mayor atención la voz del Señor, podremos transitar un poco más seguros y calmos esta difícil situación. Es mas sano que estar pendientes de la tele y las redes sociales ¿no te parece?

¿Hacés la prueba?

La letra del himno de acá abajo la vas a encontrar en el video↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷





Este el el Lema de la Mutual de Hombres y Mujeres Jóvenes 2018↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷




Siempre en Cristo hay paz
si aprendemos de Él.
Por amor Él nos libró
del pecado cruel.

A Él escucha bien
y te hará brillar.
Si lo puedes conocer,
siempre en Cristo hay paz.

Nos da esperanza,
nos da solaz,
Su fuerza da
cuando hay pesar.

Nos da refugio
en la tempestad.
Si no hay paz aquí,
siempre en Cristo hay paz.

Siempre en Cristo hay paz.
al andar con Él.
Ve a Galilea y
a Jerusalén.

Sana el corazón,
llanto ya no habrá.
Si vivimos como Él,
siempre en Cristo hay paz.

Nos da esperanza,
nos da solaz,
Su fuerza da
cuando hay pesar.

Nos da refugio
en la tempestad.
Si no hay paz aquí,
siempre en Cristo hay paz.

Nos da esperanza,
nos da solaz,
Su fuerza da
cuando hay pesar.

Nos da refugio
en la tempestad.
Si no hay paz aquí,
siempre en Cristo hay paz.
Si no hay paz aquí,
siempre en Cristo hay paz.