En primer lugar, creé este blog al escuchar a un líder en una conferencia de estaca que animaba a compartir nuestras creencias a través de las redes sociales (cosa que conté en esta publicación).
Algo que compartió un líder de la Iglesia en cuanto al uso de las redes sociales:
"Los medios de las redes sociales son herramientas globales que pueden afectar personal y positivamente a muchas personas y familias; y creo que ha llegado el momento de que nosotros, como discípulos de Cristo, utilicemos estos medios inspirados de manera apropiada y mucho más eficaz para testificar de Dios el Eterno Padre, de Su plan de felicidad para Sus hijos, y de Su Hijo Jesucristo como el Salvador del mundo; para proclamar la realidad de la restauración del Evangelio en los últimos días y para llevar a cabo la obra del Señor (...) Como discípulos, nuestro objetivo debe ser el de utilizar los medios de las redes sociales como vehículo para proyectar la luz y la verdad del evangelio restaurado de Jesucristo en un mundo que cada vez está más oscuro y confuso." ("Inundar la tierra como con un diluvio", élder David A. Bednar, del Quórum de los Doce Apóstoles, 19 de agosto de 2014, Semana de la Educación en el campus de la Universidad Brigham Young, en Provo, Utah)
En segundo lugar, amo escribir. Mi sueño, desde adolescente, fue ser escritora. Empecé, escribiendo poemas pero después me incliné por los cuentos. Tengo varios terminados aunque nunca publiqué (salvo uno breve, en una antología). Por ahora ese sueño quedó en suspenso, lo dejo en manos de Dios.
Mientras tanto, trato de pulir mi escritura, perfeccionar mi técnica (me gustaría inscribirme en un taller literario pero nunca me decido 😖). Este blog cumple ese cometido. Y ahí voy, con este don o talento de escribir que me dió el Padre Celestial para usarlo en la edificación de Su Reino.
¿No son razones valederas para tener un blog? ¿Qué opinan ustedes? ¡Espero sus comentarios!