Como dije, en el post anterior (Diario de viaje a San Clemente: Dia 2.) algo que hago al llegar a un lugar turístico es llenarme de folletería para saber que opciones para visitar hay. Prefiero los lugares al aire libre en vez de meterme en lugares cerrados (salvo que sea un museo o algo similar).
Del Partido de la Costa, con mi familia conocemos prácticamente todo, desde Las Toninas hasta Punta Médanos. Solo nos faltaba conocer mas en profundidad San Clemente.
Y en San Clemente, visitamos (el miércoles 18 de enero de 2017) un lugar llamado Punta Rasa, en donde se unen el Río de la Plata y el mar. Es un lugar al que es recomendable ir en auto (algunos van en motos o bicicletas; incluso, si se animan, pueden ir caminando). Está a 5 km del centro de San Clemente y no hay nada en el camino. Es solitario. A los costados del camino, se pueden ver cangrejales y, desde un mirador, observar a las aves.
En una oportunidad que visitamos San Clemente, de pasada, casi vamos pero no teníamos auto y no hay transporte público que te lleve. Además nuestro hijo mayor era pequeño y nos iba a resultar difícil caminar con él, así que lo pospusimos.
Normalmente, cada vez que vamos a la playa, vamos por la mañana, a eso de las 9 y nos quedamos hasta las 11 más o menos, cuando ya el sol empieza a calentar demasiado. Pero esta vez, el día estaba fresco para meterse al mar así que decidimos ir a Punta Rasa. Teníamos todo en el auto, por si queríamos sentarnos en la playa cuando llegáramos pero olvidamos un pequeño detalle: no llevamos comida ni hielo para enfriar bebidas en la heladerita. Así que estuvimos solo un rato. Una pena, porque el paisaje es verdaderamente hermoso y la playa muy amplia y no tan concurrida. Pero si Dios quiere, volveremos.
A continuación dejo unas fotos para que juzguen por ustedes mismos si vale la pena visitar Punta Rasa:
Una recomendación, por si alguna vez visitan San Clemente y deciden pasar por Punta Rasa: pidan la Tabla de Mareas en una casa de pesca local. (En la Oficina de Turismo les van a saber orientar donde hay). Es importante recordar esto porque cuando sube la marea en Punta Rasa uno se puede quedar varado ahí, según supe.
Al regresar, fuimos a la playa. Ya era cerca del mediodía. Comimos algo rápido allí y mi esposo y mi hijo se metieron al agua. Resultado: aunque se pusieron protector solar, se quemaron un poco. Nada que un poco de crema de áloe vera no curara.