Por la mañana, visita al Templo. (Una de las metas que me puse para éste 2017 es asistir como mínimo una vez al mes). Pude efectuar ordenanzas por mis antepasados. Me sentí especialmente emocionada cuando pude trabajar por mi abuela paterna, a quien no conocí.
Al salir, como siempre saqué un par de fotos. Otros miembros se estaban sacando fotos, también. ¡Es maravilloso! Por más veces que hayamos ido al Templo, las fotos en los jardines, al lado de la fuente, en la entrada del Templo son infaltables. ¡Es que somos felices de ir al Templo y lo queremos registrar!
Mi sesión de fotos en el Templo:
A mi mente vinieron las siguientes palabras del presidente Thomas S. Monson: “Al tocar nosotros el templo, el templo nos tocará a nosotros”. Y de ahí la idea de las fotos.
Por la tarde, salida en familia a una Feria de Colectividades:
Benja comiendo empanadas de jamón y queso |
Yo me incliné por algo dulce ésta vez... Ya era de tarde, hora de la merienda😋 |
No me decidía... |
Baclavá en el stand de Siria. Rico. Pero muuuuy dulce para mí. |
¡Quería algo salado para neutralizar tanto dulzor! Elegí una arepa de queso colombiana |
Lo que quedó de la arepa... |
De yapa, pan casero... No pudimos esperar y, por poco, se acaba antes de llegar a casa. |
Hermoso sábado, alimentando el espíritu... y el estómago 😉.
Los dejo con unas palabras que citó el presidente Monson alguna vez (y que reflejan lo que yo sentí que estaba haciendo al ir al Templo, primero, y luego al pasear con mi familia):
“Haz tu deber, que es lo mejor; y deja el resto en manos del Señor”Espero que les haya gustado el post. ¡Nos vemos en la próxima!