Ayer, despedimos el año de una manera diferente y especial. En primer lugar, nuestra cena fue preparada por nuestro hijo menor. Nada de comidas abundantes ni muy elaboradas, simplemente unas pizzetas que él mismo amasó y horneó.
En segundo lugar, después de la cena, hubo una Noche de Hogar, planeada y dirigida por nuestro hijo mayor. Lo mejor de lo mejor: la iniciativa fue de mi esposo (fue él quién le dijo que la preparara).
La lección estuvo a cargo de Christian, quién se tomó el trabajo de armar un Power Point muy atractivo para la ocasión, y se trató de las metas.
Dos de las diapositivas
Deliberamos, juntos, en cuanto a las preguntas y quedamos en trabajar en ellas en los próximos días.
Para el tiempo del juego, Kahoot fue el elegido. Esta es una plataforma en la que varios participantes compiten por ver quién se lleva más puntos al contestar determinada cantidad de preguntas de un rubro específico. Puede ser sobre música, películas, deportes o lo que se te ocurra. Para poder jugarlo es necesario tener acceso a internet ya que los participantes se conectan a la página a través de un pin que se debe ingresar en el celular.
De una manera (casi) espontánea anoche nuestra familia llevo "los principios de la fe, de la oración..., del respeto, del amor... y de las actividades recreativas edificantes" a la práctica.