De casa, salimos tempranito. A las 5.30 ya estábamos arriba. Cosa curiosa: ni a mí ni a Benja nos costó levantarnos.
"¿Quién nos apartará del amor de Cristo? ¿Tribulación, o angustia, o persecución, o hambre, o desnudez, o peligro, o espada? ...ni la muerte, ni la vida, ni ángeles, ni principados, ni potestades, ni lo presente, ni lo por venir, ni lo alto, ni lo profundo, ni ninguna otra cosa creada nos podrá apartar del amor de Dios, que es en Cristo Jesús, Señor nuestro." (Romanos 8: 35, 38-39)
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| Rumbo al Templo. |
Así estaba el Templo cuando llegamos, dos colectivos y casi una hora después ↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷
"Porque, de cierto os digo, que soy el Alfa y la Omega, el principio y el fin, la luz y la vida del mundo, una luz que resplandece en las tinieblas..." (Doctrina y Convenios 45: 7)
"He aquí, soy Jesucristo, el Hijo de Dios. Soy el mismo que vine a los míos... Soy la luz que brilla en las tinieblas..." (Doctrina y Convenios 6: 21)
Así fue aclarando↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷
Una pausa para desayunar↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷
Las hermanas que fuimos (algunas, líderes; otras, madres de jóvenes)↷↷↷↷↷
Los jóvenes antes de entrar a realizar las ordenanzas por sus antepasados↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷
Una última foto con los jóvenes y adultos que acompañaron, antes de volver a casa↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷
Como familia, dimos aún una vuelta más por los jardines del Templo y aprovechamos para seguir fotografiándonos↷↷↷↷↷↷↷↷↷↷
Así disfruta la juventud de La Iglesia de Jesucristo las vacaciones de invierno: trabajando para unir generaciones.
"He aquí, yo os envío a Elías el Profeta antes que venga el día de Jehová, grande y terrible. Él hará volver el corazón de los padres hacia los hijos, y el corazón de los hijos hacia los padres," (Malaquías 4: 5-6)
"Entonces citó el quinto versículo en esta forma: He aquí, yo os revelaré el sacerdocio por medio de Elías el Profeta, antes de la venida del grande y terrible día del Señor. También expresó el siguiente versículo de otro modo: Y él plantará en el corazón de los hijos las promesas hechas a los padres, y el corazón de los hijos se volverá a sus padres..." (José Smith-Historia 1:38-39)
